Las estufas a gas son sistemas de calefacción eficientes que funcionan con gas licuado o natural, proporcionando un calor potente y uniforme. Son ideales para espacios medianos o grandes, ya que generan una rápida elevación de la temperatura. Veamos los distintos tipos que existen, su funcionamiento y otros aspectos clave.
Estos productos se elaboran en diferentes modelos, ya sean con llama abierta, catalíticos e infrarrojos, cada uno con distintas ventajas en consumo y distribución del calor. Además, de que las puedes elegir en diversos tamaños, según tus espacios, desde modelos de estufa a gas 5 kilos hasta diseños más grandes para lugares comerciales.
Por otro lado, se fabrican con un sistema de encendido que puede ser manual o electrónico, y algunas incluyen reguladores de temperatura para mejorar la eficiencia. Además, cuentan con sistemas de seguridad como apagado automático en caso de detección de fugas.
Existen diversos tipos de estufas a gas, las cuales difieren en tamaño y modo de generación de calor.
Este tipo de estufa utiliza un panel cerámico que emite calor por radiación infrarroja. Además, es eficiente en el consumo de gas y ofrece una calefacción rápida y uniforme. También es ideal para interiores, ya que no genera corrientes de aire y mantiene el calor por más tiempo. Además, muchos modelos cuentan con sistemas de seguridad como apagado automático en caso de falta de oxígeno.
Estos modelos combinan dos sistemas de calefacción, generalmente infrarrojo y convección, para ofrecer una distribución de calor más eficiente y equilibrada. Esto permite calentar el ambiente de manera rápida y mantener una temperatura constante con menor consumo de gas. A diferencia de las estufas a pellet, las híbridas incorporan dispositivos de seguridad para evitar riesgos en su uso.
Diseñada para terrazas, patios y otros espacios abiertos, genera calor mediante quemadores de gas protegidos por reflectores que distribuyen el calor de manera uniforme. Al contrario de la estufa eléctrica, la de gas es resistente a las condiciones climáticas y suele tener un diseño estilizado, como los modelos tipo pirámide o sombrilla.
Asimismo, ofrece una alta potencia para combatir el frío en exteriores y cuenta con medidas de seguridad como apagado automático en caso de inclinación o falta de gas.
Las estufas a gas destacan por su eficiencia y alto poder calórico, permitiendo calentar espacios de manera rápida y uniforme. Son una opción versátil, ya que existen modelos para interiores y exteriores, adaptándose a diferentes preferencias.
Su autonomía es otra ventaja, ya que no dependen de la electricidad como las chimeneas eléctricas. Así, son útiles en cortes de luz o zonas sin acceso eléctrico. Otro beneficio es que muchos modelos incluyen mecanismos de seguridad, como apagado automático y sensores de oxígeno, para un uso más seguro.
Para garantizar un uso seguro de las estufas a gas, considera las siguientes recomendaciones:
Con una amplia variedad de modelos, su funcionamiento rápido y un correcto uso, las estufas a gas pueden ofrecer una excelente experiencia de calefacción sin depender de la electricidad.